Especialmente aquí, en nuestro país, tuvimos que darnos cuenta de que, debido a los hábitos alimentarios locales, se suministra muy poco magnesio al cuerpo a través de la ingesta de alimentos.

Como resultado, muchas personas se quejan de artritis, dolor al caminar, fatiga, desgano, obesidad y problemas dentales, son solo una pequeña parte de lo que una deficiencia de magnesio puede en nuestr cuerpo.

El efecto resultante, y también alarmante, muestra que muchas personas en nuestro país padecen deficiencia de magnesio sin saberlo.

Además, una mayor necesidad de magnesio, por ejemplo debido a actividades deportivas, o una mayor excreción de magnesio, otro ejemplo debido a la falta de receptores en la descomposición de los alimentos y, por tanto, en última instancia, la excreción de magnesio no procesado en el tracto gastrointestinal, también pueden ser responsables de la deficiencia.

Una deficiencia de magnesio suele notarse por los calambres musculares o en las pantorrillas.